El ministro de Desarrollo Productivo, Jorge Feijóo, y el titular del Ente Provincial Regulador de la Energía de Tucumán (Epret), Sergio Sánchez, comparten la misma opinión. Los dos sostienen con firmeza que la construcción de la planta transformadora de energía en Ayacucho 266 no ocasionará inconvenientes a la salud de la población porque -según afirman- el proyecto superó todas las instancias de control. Además, indicaron que construir una central eléctrica fuera del centro sería "económicamente inviable".

El ministro alperovichista recibió ayer a LA GACETA en su despacho. También estuvo presente Sánchez, quien desplegó en una mesa cinco carpetas. "Queremos llevar tranquilidad a la población de que esta obra se ajusta a las normas ambientales", aseveró el encargado de controlar que la empresa EDET haga bien su trabajo en la provincia. El diálogo con Feijóo y Sánchez se desarrolló de la siguiente manera:

- ¿Ustedes son conscientes del temor que le genera a la población este tipo de emprendimientos?

- Sánchez: es cierto es que genera temor y nosotros tenemos que explicar a la sociedad, que ahora se ve afectada por esta suerte de rumores, sobre cuáles son las medidas preventivas que se tomaron para controlar cualquier evento. Hay que ser claros, ¿cuántos eventos han comprometido a familias o a vecinos de este tipo de instalaciones? La ciudad de Buenos Aires tiene plantas de distribución de 220 kv, más del doble de lo que estamos construyendo en Ayacucho 266. El dilema es el siguiente: o hacemos este tipo de instalaciones o no se podrá satisfacer la demanda de la gente.

- ¿Por qué cree entonces que el defensor del Pueblo de Jujuy recomendó que una obra similar se haga en un lugar alejado del centro?

- Sánchez: colocar estaciones lejanas para poder abastecer y sacarlas del ámbito urbano es económicamente inviable. Mientras más grande es la ciudad es más inviable. No sé por qué Jujuy hizo eso. La verdad no sé.

- Pero la gente tiene miedo de que se produzca un accidente...

- Sánchez: si se llegara a producir un accidente no pasaría absolutamente nada. Sabemos que existe el riesgo de un accidente. Pero lo que quiero decir es que todo lo que está ahí no tiene partes móviles. Es todo compacto. Indudablemente se pueden producir fallas en los equipos, con lo cual uno puede asociar cierto riesgo. Pero todo el proyecto detalla de qué manera se acota ese riesgo. ¿Es posible que un equipo se prenda fuego? Claro que es posible. Pero el potencial accidente quedará confinado sólo en ese lugar. Es una central compacta. Es una de las más modernas en tecnología que hay en el país.

- ¿Y respecto a la salud de la población?

- Feijóo: para que se proceda a la construcción de la planta se pasó por varios controles hasta llegar a la audiencia pública. Ningún proyecto llega a la audiencia pública sin haber aprobado los requisitos legales y de apto ambiental. Si llega a la audiencia es porque se cumplió con las normas. Esta planta es la solución universal. En todos los grandes centros urbanos del mundo se utiliza esta solución. ¿Por qué? Porque es la solución técnica racional ajustada a normas ambientales.

- Los vecinos también cuestionan que la obra comenzó a construirse antes de ser aprobada por los organismos de control...

- Feijóo: hay que separar dos cosas. En primer lugar está el pedido de excepción que se le solicitó a la Municipalidad. Y en segundo lugar está la obra misma. La excepción al Código de Planeamiento Urbano que se pidió tiene que ver con la altura que tendrá el emprendimiento. No tiene nada que ver con el contenido, con lo que va a dentro de la obra. Hay que aclarar, además, que son dos proyectos distintos que se ejecutan en el lugar. Para poder hacer la obra de transporte de energía, EDET tuvo que correr el centro de transformación, que ya funcionaba, hacia el fondo el predio. Durante ese tiempo se hizo la obra de adecuación, que realmente no requiere un tratamiento extraordinario. Para hacer esta gran obra, primero había que adecuar las actuales instalaciones.

- ¿Por qué se decidió avanzar en este emprendimiento?

- Sánchez: Tucumán tiene tasas extraordinarias de crecimiento de consumo. Y este año registra tasas de crecimiento muy elevadas, el doble de las históricas.

- Feijóo: en enero de 2012 se dio un crecimiento de consumo interanual del 18%, cuando en los últimos cinco años la demanda de energía había crecido un 7%. Y las estaciones de transformación son las que vienen a subsanar esta demanda.

- ¿Cuánto costará la obra?

-Sánchez: Unos $ 27 millones. Y es ejecutada y financiada por EDET.

- ¿Y cuáles serán los beneficios que traerá en el corto plazo?

- Feijóo: Unas 80.000 personas que residen en la zona centro-sur de la capital tendrán un mejor servicio y habrá menos caída de tensión. Sí somos conscientes que tendríamos que haber sido más eficientes a la hora de comunicar a la población los beneficios de este proyecto.

Ecos de una ordenanza

En febrero se realizó una audiencia pública en la provincia para habilitar la construcción de una planta eléctrica en Ayacucho 266.

El 30 de agosto ingresó al Concejo Deliberante un pedido del Epret mediante el que solicitó una excepción al Código de Planeamiento.

El jueves, los ediles oficialistas aprobaron de sopetón el proyecto. La iniciativa fue tratada sin que contara con dictamen de comisión. 

Pese a que el Gobierno asegura que la población no corre peligro, los vecinos evalúan llevar su queja a la Justicia.